miércoles, 10 de diciembre de 2014

Resumen del libro "Las Moscas" de Jean Paul Sartre

Orestes (bajo el nombre de Filipo) llega a la ciudad de Argos junto a su pedagogo. Hasta el momento, Orestes ha tenido una juventud normal. Los habitantes de Argos viven en veneración a Júpiter, su dios. Todos sus habitantes están anclados en un pasado por sus propios remordimientos. Hay crímenes e intrigas. Su soberano es Egisto y su soberana, Clitemnestra. Ambos han cometido asesinato contra Agamenón, -esposo de Clitemnestra quince años atrás, antes de su muerte-. 

Una vez al año, Egisto se pone sus vestimentas negras y hace el rito de convocar a los muertos. Está tan instalada esta creencia, que todos los habitantes sufren por la llegada de sus antepasados y las recriminaciones a las que son sujetos.

Electra, hija de Clitemnestra y Agamenón, vive en palacio, pero es reducida a la condición de una sirvienta, bajo el yugo de su madre y de su padre postizo. 

Electra y Filipo se conocen. Orestes se da cuenta de que es él hermano de Electra e hijo de Clitemnestra y se enamora de su hermana. Esta le hace ver la necesidad de que él ejecute a sus padres. Le dice que lo ha visto numerosas veces en sueños y planea con gusto su venganza, para redimirse de todas las penas que le han hecho pasar. 

Orestes cambia en un solo día de mentalidad. De joven pacífico se convierte en un joven con fuerza y deseos de venganza (o quizá de justicia). Él dice que ha encontrado dentro de sí la libertad. 

Tras matar a Egisto y a Clitemnestra, ambos huyen, buscando la libertad y la felicidad en el pueblo vecino de Corinto, sin embargo, Electra está llena de arrepentimiento y de culpas. Le caen encima las moscas que son las Furias o las Erinias. Luego, Júpiter la rescata y Electra cae a sus pies, dispuesta a vivir como hasta entonces y entregando su tan ansiada libertad. 

La multitud busca a Orestes para matarlo, pero éste, con autoridad, les hace ver su supremacía y la multitud vuelve a apaciguarse.

Obra basada en la mitología griega, cuyo tema es el crimen y la venganza.
 Conclusión: 
Orestes me pareció un personaje complejo, ya que si bien al principio de la obra se mostraba sereno, tranquilo, humilde, “que no mata una mosca”, tuvo una especie de metamorfosis. De pronto aquél carácter sumiso, se convirtió en un temperamento de extrema fortaleza física y mental, con convicción, y con la valentía suficiente para matar a Clitemnestra –su madre- y a Egipto.

Es obvio que el amor que su hermana le desató, no es amor filial, sino amor pasional, de pareja. Se ve a sí mismo como más allá del temor, del miedo, incluso a ser asesinado por las turbas, y paradójicamente esa falta de temor (que conlleva autoridad y certeza) le da la libertad total.

No sufre aparentemente (como en las otras obras) de culpas ni recriminaciones por la muerte de su madre y padrastro. Desde siempre ha creído que el acto era justo y en eso ampara su pensamiento.

Trata de convencer a Electra –al final de la obra- que no haga caso de las Erinias. “Tu debilidad es lo que les da fuerza”. Es un pensamiento muy arraigado últimamente en la filosofía “new age” y en algunas corrientes psicológicas del comportamiento humano: “A mí no se atreven a decirme nada”. Era invulnerable, porque su pensamiento se regía por lo que él pensaba que era lo correcto y no se dejó influenciar bajo ningún momento, por el pensamiento de los demás. Había conquistado su libertad, tanto externa como interna.

Electra es una niña-mujer con grandes deseos de venganza. Se muestra rebelde, furiosa, pero carente de la fuerza necesaria para llevar el deseo de venganza a hechos concretos y materiales. Siempre vio en su hermano Orestes la fortaleza. En sueños veía recurrentemente cómo él adquiría la fuerza para llevar a cambio la tan deseada venganza en contra de su madre y padrastro. 

Habiendo sido tratada como a una sirvienta, se sentía víctima de su madre y de las circunstancias. Nada de lo de su madre le parecía hermoso. La odiaba más allá de cualquier razonamiento. 

Al conocer a su hermano Orestes bajo el nombre de Filipo (y con la naturaleza inicial de Orestes: tranquila, pacífica) se ve atraída hacia él. Sin embargo, cosa extraña, ella que siempre deseó la venganza (por sobre todas las cosas) y la llegada de Orestes para llevarla a cabo, una vez que éste la ejecuta, lo desprecia por lo mismo que ella le pidió que hiciera. Electra sí tuvo enormes culpas y llegó casi a la muerte y locura debido a ella. No se dejó persuadir por los deseos de Orestes de huir hacia un mundo de paz y alegría. Se consumó en su propia venganza, sobre todo, al encontrar el enorme parecido entre ella y su madre, el cual no fue notorio sino después de la muerte de la madre.

Es irresponsable, pues no quiere (por ningún motivo) hacerse cargo de la muerte de la madre, por más que fue ella quien la concibió y quien le pasó su veneno a Orestes. La justificación fue siempre su arma… pero nada pudo impedir que “pagara” por su crimen a través de su culpa.

Júpiter se ve como un dios con características mortales. Le encantaba regodearse de la culpa del pueblo. Pensaba que aquel que fuera libre, se parecería a él y serían por tanto, idénticos y solitarios. En su propia libertad, encontraba la soledad más profunda, porque hasta ese momento, era el único en tenerla. Orestes de pronto, obteniéndola, se compara con él. Lo insta a que le sirva y se da cuenta de que Orestes está más allá del bien y del mal, que se ha liberado y que no puede más con él. Esto lo vuelve sinó vulnerable, sin poder hacia él, algo que para un dios era inconcebible.

Clitemnestra parece haber pagado muy caro el crimen contra su esposo. Si bien no tuvo remordimientos, tampoco su vida en adelante fue un jardín de rosas. Fría, orgullosa y sin instintos maternales. La misma de siempre en todas las versiones. Solo que hasta ahora me doy cuenta de que pasados los años, no logra la felicidad anhelada.

Egipto es un personaje que vivió su reinado con mucho vacío. Dejó de ser él mismo para cumplir con la farsa de ser aceptado y temido por su pueblo. No pudo sustraerse a esta farsa en la que él mismo se vio envuelto, perdiendo así, toda capacidad de dicha y libertad. 

Él mismo afirma que desde que se viste de negro, su corazón está igual y que lo mismo le da morir que vivir. Cuando se da cuenta de que Orestes lo va a matar, no opone resistencia, en el fondo quizá, hasta lo deseaba. Había perdido su rumbo, su brújula, su vida y se quedó con las manos vacías.

Las Erinas: Viven de la culpa y el remordimiento del pueblo: son las moscas. Por eso, el pueblo (que vive en culpa constante) está lleno de moscas, que a su vez, cada vez se vuelven más gordas, debido al alimento que les da la culpa y el remordimiento de sus gentes. 

Cuando Electra se ve asediada por la culpa, las Erinias la contemplan como un banquete de reyes. Tratan también de hacer caer a Orestes, pero les fue imposible, dado que él ya había ganado su propia libertad (llámese libertad de conciencia).

Resumen del libro "El Extranjero" de Albert Camus

Capitulo I
Los hechos ocurren en Argel. El protagonista, Meursault recibe un telegrama en el que se le informa que su madre ha fallecido. Debe partir hacia Marengo, donde se encuentra el asilo de ancianos, lugar en el que se hallaba su madre. Pide permiso a su patrón y emprende el viaje.Una vez en el asilo, él esta centrado en sus preocupaciones, se niega a ver el cuerpo de su madre y realiza reflexiones que demuestran su indiferencia ante un hecho de tanta importancia. En lugar de llorar a su madre, de expresarle su dolor, conversa con el conserje, sobre Paris. Fuma, se mantiene distante con los amigos de su madre que vienen a participar del velorio, le molesta el llanto de una de las mujeres. Se duerme. El entierro le resulta pesado, tortuoso por el calor de la jornada. Una vez concluido regresa a Argel con alegría pensando solamente en dormir. Nada hubo en él que expresara aflicción, pesar. Había muerto su madre, sin embargo, todo fue un trámite.
Capitulo II
Al despertar y darse cuenta que es sábado, siente el gozo de saber que tiene aun dos días de "vacaciones" (en realidad es el permiso que pidió a su jefe por la muerte de su madre) y decide ir a bañarse al mar. Se encuentra con Maria Cardona, antigua mecanógrafa de su oficina, por la que había sentido deseos en el pasado. La invita al cine y luego pasa la noche con ella. Habían transcurrido pocas horas del entierro de su madre. Sin embargo, no pareció importante. En cambio, a Maria le impresionó, aunque no hizo ningún comentario. Él, entendía que no era su culpa; ya se había disculpado con su patrón. Con ella no se disculparía.Llega el domingo, describe la gente que pasa por la calle, reflexiona acerca de lo que harán y donde irán y también expresa el aburrimiento que le provoca ese día. Pensó que ya era un domingo menos, que su madre estaba ahora enterrada, que volvería a su trabajo. Nada había cambiado. El vacío que vive es extremo. No hay ninguna expresión de sensibilidad en sus reflexiones. Todo en él acontece como en forma autómata, fría muy fría.
Capitulo III
Vuelve a su trabajo. Su patrón lo saluda por el luto y le pregunta por la edad de su madre. No la recuerda. Da una edad aproximada. Demuestra aquí un gran desamor por ella. Algo extraño, sus afectos no significan mucho, pero si el hacho de que la toalla que utiliza para secar sus manos, esté húmeda por la tarde. Sale a almorzar con un amigo, duerme un poco y luego regresa a la oficina. Al regresar a su casa, se encuentra con Salamano, un vecino viejo que tiene un perro sarnoso e enfermo de la piel. Describe la relación entre ambos. A continuación se encuentra con Raymond Sintes, un segundo vecino que lo invita a comer algo en su habitación. Raymond le cuenta una historia que ha vivido con una amante. Lo escucha pero casi sin interesarse por el relato. Por eso, cuando Raymond le pide consejo, le responde con oraciones breves y ante la propuesta de escribir la carta, responde afirmativamente de la misma forma que hubiera rechazado.
Le era indiferente hacerlo o no. No le molestaba. Una vez terminada, vuelve a su departamento y escucha gemir al perro del viejo Salamano. A Meursault le daba lo mismo ser su camarada que no serlo. Total imparcialidad.
Capitulo IV
Trabajó mucho toda la semana. Fue dos veces al cine con Emmanuel, el sábado va nuevamente a la playa y pasan la noche juntos. El domingo almuerzan juntos. Sienten una discusión en la habitación de Raymond. Allí le cuenta a Maria la historia del amante del vecino. Termina interviniendo la policía. Él, debe salir de testigo, afirma que le "da lo mismo" aunque no sabia que debía decir. Cuando regresan se encuentran con Salamano que había extraviado su viejo perro. Su consuelo hacia el vecino es muy técnico, solo hace mención a la actitud de la perrera. No es capaz de captar la soledad y el dolor de Salamano.
Capitulo V
Un día en el que recibió varias propuestas: Raymond lo invita a pasar el domingo en una cabaña en la paya de un amigo, cerca de Argel. El patrón le propone enviarlo a una oficina que instalará en Paris. Meursault expresa que le da igual. Ante la pregunta de su jefe si no le interesa un cambio de vida, responde que nunca se cambia de vida, que todas valían lo mismo. He aquí la absoluta indiferencia. Su jefe observa que jamás responde directamente que no tiene ambiciones. Por la tarde Maria le pregunta si quería casarse con ella. Nuevamente la respuesta es: "me da igual". No hay en él "sí" o "no". Pareciera que nada tiene sentido, nada le importa lo suficiente como para jugarse en una decisión personal única y responsable. Maria lo ama y se lo dice; él ciertamente no la quiere y lo dice. Para él, el matrimonio no es cosa seria. Pero si ella desea casarse él lo haría cuando ella lo disponga.Cena en el bar de Celeste, una extraña mujercita se sentó a su mesa, pidió la cena y extrajo una revista radiofónica en la que marco las emisiones. Esto le llamo la atención a Meursault. Por ello al salir ella, él como no tenia nada que hacer, salió también y la siguió. Termino por perderla entonces, volvió a su casa, encuentra a Salamano desolado por la perdida de su perro. Habla con él, lo escucha, se aburre pero como no tiene nada que hacer, ni sentía sueño, se queda con su vecino. No es el afecto ni la preocupación del otro lo que lo hacen quedar con Salamano. Sólo para poder dejar pasar las horas.
Capitulo VI
Llego el domingo. Raymond, Maria y él marchan hacia la cabaña de la playa de Masson. Al salir, enfrente había un grupo de árabes, entre ellos estaba el hermano de la joven a la que Raymond golpeo. Sin embargo, no les dieron importancia. Siguieron su camino. Se bañan, almuerzan y luego los tres hombres salen a caminar. Se cruzan con dos árabes, que vienen tras Raymond a vengar la paliza que le dio a su amante. Raymond es herido. Lo llevan a un medico. Nuevamente vuelve a salir con Meursault y se encuentra otra vez con los árabes Raymond saca un arma pero no la dispara. Meursault se la pide. Regresan, pero él no quiere encontrarse con las mujeres y decide seguir caminando. El sol le molestaba, el calor lo sofocaba. Encuentra al árabe que hirió a Raymond, le muestra su cuchillo y él dispara. Meursault comprende que destruyó el equilibrio del día. Por primera vez un domingo fue diferente para él. Había sido feliz. Disparo cuatro veces más sobre el cuerpo y reconoce que así llama a la puerta de la desgracia, ya que esto lo condenara seguramente.
Segunda Parte
Capitulo I
Es llevado a un juez de instrucción e interrogado. No había escogido abogado, ja que otra vez daba muestras de total indiferencia, por lo tanto le envían un letrado de oficio. El abogado decide ayudarlo, pero Meursault, absolutamente sincero le afirma que perdió la costumbre de interrogarse, de reflexionar. Su abogado le pregunta si sintió dolor el día del entierro de su madre. Los instructores saben de las muestras de insensibilidad de ese día y harán hincapié en ello el día del juicio. El abogado no logró convencerlo de decir que ese día había reprimido sus sentimientos naturales. Al poco tiempo, compadece nuevamente ante el juez. El juez buscaba el arrepentimiento de él, pero ni siquiera ante el crucifijo, se conmovió. Afirma no creer y más que culpable o arrepentido se confiesa aburrido. El juez resultaba ser una persona muy exaltada y preocupada por la pasividad de Meursault. Las visitas del juez continuaron, pero él no le prestaba atención, estaba cansado de contar siempre lo mismo.
Capitulo II
Maria lo visita por primera y única vez ya que se lo prohibían por no ser su mujer. Allí comienza a sentir que está prisionero.Aquí describe las sensaciones que siente en la prisión: la falta de una mujer, la prohibición de fumar, la falta de libertad. Reflexiona sobre el paso del tiempo estando encerrado. Por primera vez, algo parece importarle. Es el castigo, pero, confiesa no sentirse desgraciado. El único problema era matar el tiempo y para ello comenzó a recordar. Así terminó por no aburrirse. Confiesa que con las horas de sueño, los recuerdos, la lectura de una historia seca y la alternancia de la luz y la sombra discurrió el tiempo. Habían pasado cinco meses.
Capitulo III
Comienza su juicio. El abogado le informa que no es el más importante porque hay otro caso: homicidio (este caso ha atraído a muchos periodistas, Meursault hace referencia a el ambiente de desparpajo y normalidad que hay entre los periodistas.) Este último concentró la atención de los periodistas, por ello hay mucha gente. Al entrar al juzgado le da la sensación de estar en un club. Todos se conocen, se saludan; él se siente un intruso, pero está tranquilo. Hasta que escucha los nombres de los testigos: el director y el conserje del asilo, Raymond, Massou, Salamano, Maria. Comienza a ser interrogado por el fiscal que hace hincapié en el tema de la madre, porque la llevó al asilo. Luego toma testimonio al director y al conserje del asilo. Ambos hablaron de su negación a ver el cuerpo, que no lloró, que se fue inmediatamente después del entierro sin recogerse ante su tumba, ni siquiera sabía la edad de su madre. El fiscal ante estas respuestas experimentó una sensación de triunfo. Meursault se da cuenta de que las cosas no van resultando a su favor porque no solo se lo juzga por su crimen sino también por no haber sido un buen hijo. Maria, Massou, Raymond, testimoniaron destacando sus cualidades, pero el fiscal se mantuvo en la misma línea: para desacreditarlo ante el jurado.
Capitulo IV
Continúa el Juicio. El protagonista siente que se habla más de él que de su crimen. Se realizan los alegatos del fiscal y el abogado defensor. El fiscal insiste en que jamás lamentó haber asesinado al árabe. Meursault piensa que él jamás lamentó nada verdaderamente. Cuando el presidente del tribunal le pregunta si desea decir algo, expresa que no tuvo intención de matar al árabe, que todo fue por causa del sol. Todos rieron en la sala. El alegato del abogado defensor fue menos efusivo. El tribunal se retira de la sala. Delibera. Regresa y se da la sentencia: culpable de asesinato. Sería decapitado en una plaza pública y en nombre del pueblo francés.
Capitulo V
Por tercera vez se niega a recibir al capellán, no tiene deseos de hablar. Tan solo piensa en las posibilidades que se le presentan para volver a la libertad, pero se centra sobre todo en dos cosas: el alba y su petición de indulto. Paso sus noches esperando esa alba en la que lo ejecutarían. Cuando el amanecer pasaba y seguía vivo, reflexionaba sobre el indulto. Deseaba obtenerlo pero también se imaginaba que la petición era rechazada y todo volvía a comenzar. Finalmente el capellán entra en su celda e intenta explicarle porque necesita el consuelo de Dios. Él, sigue firme en su incredulidad y sostiene que todos estamos condenados a muerte, por lo que ese consuelo no tiene sentido, llega a molestarse mucho y a tomar al sacerdote por el cuello. Intervienen los guardias. El capellán lloró por él. Meursault recuperó la calma cuando éste se fue. Agotado, se durmió. En el límite de la noche, las sirenas sonaron. Anunciaban su ejecución. Por primera vez, pensó en su mamá y se abrió "a la tierra indiferencia del mundo". Deseaba la presencia de muchos espectadores que lo acogieran con gritos de odio.
"Me sorprendió el final de la novela, sinceramente cuando acabe el último párrafo no podía creer que acabara así, me dejo con más intriga que antes sobre la actitud del protagonista, esta misma intriga me hizo pensar sobre la historia aún más. Creo que Camus hizo esto para intentar hacer pensar al lector, para que así siguiera preguntándose el valor de la vida y siguiera enamorado de la actitud de Meursault"

Conclusión

En la primera parte, bueno al menos así lo propongo yo, se describe a Meursault como un personaje apático, indiferente de la vida, como desconectado del mundo, este obrar de Meursault es lo que Camus establece como la "sensibilidad absurda" (El mito de Sisifo), es la "vida inauténtica" al decir de Heidegger (Sein und Zeit) en donde las personas viven para ocultar su verdadero ser, que es, ni mas ni menos que el hombre "es-un-ser-para-la-muerte".Explicándolo de otro modo, estamos destinados a morir, pero esta realidad, el camino hacia la muerte o sea la nada, nos genera una angustia gigantesca que tratamos de todos modos de evadirnos de ella. Es por ello que Meursault tiene este comportamiento indiferente, no esta enterado, en esta primera parte, de su verdadero ser, tiene una vida inauténtica, es un verdadero extranjero de su propio ser. Meursault, no se pregunta por que vivir, solo vive y con esta actitud frente a la vida se evade de su propio ser.Esta preso de la vida inauténtica.La segunda parte seria una especie de salto hacia él "ser autentico", es la liberación, es el reencuentro con su ser, este punto es central en la obra, Meursault se topa con la primera certeza en su vida, que va ha morir ejecutado, después de un juicio, por haber dado muerte a un hombre, cuando toma al sacerdote por el cuello, si mal no recuerdo, se produce una rebelión en el, descubre su ser, su verdadero y autentico ser, sabe que es un hombre destinado a la muerte y la aceptación de ella lo hace libre, y es por primera ves en su vida un hombre libre y dueño de su vida, es tan libre que ni siquiera el temor a morir ejecutado lo amedrenta, es mas bien su salvación, su verdadera liberación de aquella vida indiferente hacia las cosas y evasiva de si mismo, a partir de ahora Meursault se hace dueño de su vida, recobra su humanidad, aunque ya no le quede mas tiempo en este mundo. Albert Camus toma al nihilismo, como razón del ser (bueno todos los pensadores existencialistas lo han hecho) y lo plasma en la esta novela de manera brillante. Como tal se entiende la decisión del protagonista de rechazar la visita del capellán, ya que tomando el nihilismo como actitud hacía la vida por parte del autor no puede aceptar la existencia de una "ley superior" que determine nuestra vida.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Resumen del libro "el señor de las moscas" de William Golding

El señor de las moscas de William Golding

El señor de las moscas cuenta la historia de un grupo de chicos británicos cuyo avión ha chocado en una isla desierta en el Océano Pacífico. (Parece que hay una guerra en el mundo, lo cual importará luego.) Sin adultos, los chicos tienen que cuidarse y organizarse. Los chicos tienen entre seis y doce años. Ralph, uno de los chicos mayores, se hace el "jefe" con la ayuda de una concha de caracol. (Los chicos deciden que quien tiene la concha tiene el poder de hablar en público. Esto ayuda a establecer el orden.)
El primer problema surge cuando los chicos empiezan a temer una "bestia" en algún sitio en la isla. Deciden, sin embargo, que sería mejor hacer una hoguera para señalar a los barcos. Para hacerlo, utilizan las gafas de un muchacho que se llama Piggy ("cerdito", un tipo gordito que es el amigo más leal de Ralph).
Las cosas se calientan cuando otro chico, Jack, que está celoso del poder de Ralph, decide que los muchachos deberían poner más énfasis en cazar (hay cerdos en esta isla) en vez de en mantener la hoguera. Jack – y muchos otros también – parece hacerse más salvaje con más tiempo en la isla. Entretanto, otro personaje principal, un chico sabio y filósofo, Simon, trabaja con Piggy para hacer refugios.
Todo va muy bien hasta que los conflictos latentes se convierten en conflictos poco latentes. Los muchachos que deberían cuidar la hoguera se escapan de su trabajo y matan un cerdo. La escena hace que los chicos parezcan salvajes primitivos en vez de caballeros británicos muy bien educados. La sangre de la caza es muy emocionante hasta que se dan cuenta de que mientras satisfacían su apetito de sangre, la hoguera se apagó y un barco pasó sin verlos. También, Jack le ha pegado a Piggy en la cara, rompiendo uno de los cristales de sus gafas.
En este momento un hombre muerto en un paracaídas aterriza como Mary Poppins en la isla. Parece que viene de la guerra. De todos modos, los muchachos creen que el hombre es la "bestia" y comienza una persecución para encontrarlo y matarlo. Sólo Simon duda que exista tal criatura y cree que la bestia es una parte de ellos mismos y que sólo tienen miedo de sí mismos. Él va al bosque para contemplar la situación mientras Jack y Ralph suben al monte y encuentran la bestia, pero no se quedan el tiempo suficiente para ver que sólo es un hombre muerto.
En el grupo, Jack decide que Ralph ya no debería ser el jefe. Se separa de la unión e invita a quien quiera que venga con él para matar cerdos – y quizás a unas personas si les antoja. Ralph y Piggy se encargan de hacer la hoguera pero se dan cuenta de que la mayoría de los chicos mayores se han marchado, supuestamente con Jack. Mientras tanto, Simon está escondido en su lugar de meditación, una "cueva de parras" en el bosque, mirando a Jack y sus amigos cazar un cerdo. Esta vez matan una cerda (en una escena descrita un poco como una violación), le quitan la cabeza y la ponen en un palo en el suelo.
Simon mira la cabeza, que llama "el Señor de las Moscas" y ésta le dice (él está alucinando) que es la bestia y que es una parte de él. Simon se desmaya, se lastima la nariz y se despierta cubierto con sudor, sangre y otras cosas asquerosas. A pesar de todo esto decide seguir subiendo el monte para enfrentarse con la bestia. Simon descubre que la bestia es nada más que un hombre. Luego vomita y baja tambaleándose.

En este punto Ralph y Piggy, muertos de hambre, asisten con los otros chicos a una gran fiesta que Jack, quien está decorado como un ídolo, ha organizado. Es una reconstrucción frenética de la caza de la cerda. Sin embargo, llega Simon, todavía sangriento, sudoroso y cubierto con vómito. Se tambalea en medio de los chicos locos. Intenta contarles de la bestia pero no lo reconocen y lo pican con sus lanzas hasta la muerte. Otra vez, los chicos son representados como animales salvajes.
Esa noche el mar lleva el cuerpo de Simon. Lleva también al hombre del paracaídas, que fue recogido por el viento, otra vez en el estilo de Mary Poppins. Ralph y Piggy deciden más tarde que no tenían nada que ver con la matanza de Simon.

De aquí en adelante la situación empeora. La banda de Jack ataca a Ralph y Piggy y roba las gafas de Piggy para hacer su propia hoguera. Cuando Ralph y Piggy se deciden a hablar en calma con los "salvajes" Roger empuja una roca grande de un precipicio y ésta mata a Piggy. Ralph sale corriendo para salvarse la vida porque cree que va a acabar con la cabeza en un palo. Por fin llega a la orilla y se tropieza con un oficial de la marina británica. Los muchachos son rescatados de su guerra fingida pero quedamos con la imagen del "trim cruiser" de la marina de la guerra verdadera de los adultos.}

texto expositivo



                                                                          texto expositivo 


¿Qué quieres, viejo?...



Una de las personas contratadas demuele una casa, que en su gran mayoría era de material viejo. Ahí vivía un señor, los albañiles le decían "el viejo".

Este personaje se acuesta en una hamaca para reposar, cuando llega la noche las personas ajenas a la casa se van y el "viejo" se queda solo.

Entonces, algo pasó, todas las cosas vuelven a su posición anterior. Don Marcial, el marqués, vuelve al vientre de su madre.

Al día siguiente, el trabajo ya estaba terminado, no había nada en aquel lugar.


Carpentier sin que se pierda el ritmo de los acontecimientos, no quiere perder la atención del lector tratando de que se descubra al personaje "Don Marcial" , quien revela todos sus miedos y contradicciones de una vida adolescente